El pasado día 20 de enero se cumplieron 48 años de la muerte de Albert James Freed, más 
conocido como Alan Freed, el hombre que, parafraseando la canción de Dylan, dió nombre a un estilo de música, a una forma de vida el Rock & Roll.
Aunque nació (15/12/1921) en Pennsylvania su familia se trasladó a Salem (Ohio), en donde, tras una breve etapa formativa, trabajó en una radio local desarrollando distintas labores. En 1951 inicia la emisión de un programa musical de R&B «Moondog’s rock’n’roll party» (Moondog es otro apelativo por el que se conoce al DJ) en el que se difundía principalmente esta musica de origen afroamericano, se abría la epoca dorada del rock’nroll. En 1952 organizó el Moondog Coronation Ball espectáculo en directo con distintos grupos que promocionaba Freed. Su participación era tal que llegó a aparecer en los creditos de canciones de estos con la consiguiente acaparación de derechos de autor y por tanto acceso a una mayor parte de los beneficios económicos de las canciones promocionadas. Por otra parte, el stablishment norteamericano de la época era todavia fuertemente segregacionista y no se mostraba proclive a permitir espectáculos a los que accedían jóvenes negros y blancos sin barreras raciales que los separasen, más bien al contrario uniendose bajo aquel infernal ritmo. La gira tuvo que ser cancelada tras un escandalo en Cleveland.
En 1953 sufrió un grave accidente automovilístico que además de las heridas físicas le causó una aversión a viajar en ese medio durante toda su vida, llegando al extremo de montar en su propia casa un estudio radiofónico, para no tener que desplazarse a las instalaciones de la WINS, su emisora de radio por aquel entonces.
No había éxito que no fuese inicialmente promocionada por el gurú Freed lo que empezó a generar suspicacias, además sus convicciones musicales le generaban pocas simpatias en la industria «blanca» del R&R (prefirió apoyar a músicos negros como Little Richard frente a productosindustriales como Pat Boone). Todo esto aderezado con algún que otro escandalo más en conciertos en directo y el histórico enfrentamiento entre las emisoras de radio con las todopoderosas compañias discográficas supusieron el caldo de cultivo perfecto para la aparición del escándalo Payola auspiciado por la Sociedad Americana de Compositores, Autores y Editores (ASCAP).
Se acusó a Freed junto a otros de Djs radiofónicos de corrupción por recibir dinero a cambio de promocionar a determinadas canciones y artistas (algo habitual convertido en delito), en el fondo era una lucha por el control del mercado musical juvenil, del cual salió condenado a seis meses con libertad condicional y a trescientos dólares de multa. El mundo de Freed se desmoronó siendo el empuje final la acusación de evasión fiscal que sufrió posteriormente. Su salud en precario se resquebrajó y falleciendo a los 43 años en Palm Springs.
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